El miercoles pasado me encontraba en Bueu asistiendo a unos conciertos. Decidí comenzar mi temporada de verano inaugurando el nuevo puesto de artesanía, se me ocurrió que sabiendo el ambiente del evento, podría estar bien llevar algunas rosquillas de marihuana, algunas para vender y como siempre, como mínimo para hacer amig@s.
Sobre las 10 de la noche desplegué mi pequeño puesto de artesanía móvil y después de organizarlo elabore un cartel que anunciaba las rosquillas tanto para posibles clientes como para eventuales colegas.
La gente conocida según fue pasando por mi parada uno tras otro me repetían: "ojo, ayer fue detenido en Pontevedra un chaval que vendía pastelitos de maruja".
Mi respuesta fue que confiaba en la suerte y que posiblemente si acababan de detener a uno el día anterior estarían ya contentos con su gran "éxito policial" y que a mi ya no me vendrían a molestar. Así fue. Pasado un tiempo decidí cerrar el puesto de artesanía para no perderme los conciertos y pasear por el concierto con el cartel de las rosquillas colgado, como hago en muchas ocasiones pero ese día en particular como acto solidario con "mi colega pastelero" sobre todo por ser un caso muy parecido al mio en ese momento.
Pero me quedo la curiosidad de saber como había sido la historia de Pontevedra. Como no, muchos medios de "comunicación" se hicieron eco de "la gran operación policial contra el narcotrafico".
Según parece según la prensa la policía fue avisada por un vecino delator, como casi siempre, la mayoría de sus "éxitos policiales" son gracias a individuos indeseables como el vecino este, aunque luego cuenten que fue tras una larga investigación, bla , bla , bla...
Pues el chivato este denuncio la presencia de un individuo que "parecía estar vendiendo drogas". Allí se presentaron unos agentes que se encontraron al individuo que vendía artículos de cuero, pero también pudieron ver como un joven le entregaba 10 euros a cambio de un paquete con marihuana. Lo identificaron y registraron encontrándole varios paquetes de papel con dicha sustancia, productos alimentarios elaborados con ella y un liquido verde que supuestamente resulto ser licor de marihuana.
El individuo que contaba con antecedentes policiales fue detenido como presunto autor de un delito contra la salud publica. Tratándose de Pontevedra y de salvaguardar la salud publica a quien deberían detener es al responsable de la celulosa que eso si que es un delito contra la salud publica y contra el entorno. A pesar de las muchas protestas y peticiones de cierre sigue ahí contaminandonos y acabando con la salud de tod@s y de la ría. Pero eso no les molesta. De nuevo la lucha contra el narcotrafico se ceba en un individuo inofensivo, desarmado, que no pertenece a ninguna red y que no maneja grandes cantidades de dinero. Si se encontraba vendiendo marihuana y productos alimentarios derivados, posiblemente era para superar de alguna forma dificultades económicas.
De nuevo vemos lo inútil de la guerra contra las drogas, gracias a esta "gran actuación" la gente no va a dejar de consumir sustancias prohibidas ni los verdaderos narcos a los que nunca tocan van a dejar de hacer sus negocios. Un nuevo ataque contra un ciudadano insumiso, que no cree en la prohibición y actúa según sus propias convicciones. Un grave delito en los tiempos que corren.
El vecino delator y los policías seguro que se quedaron todos convencidos de haber hecho "un gran bien a la humanidad".
FUENTE:
La Region
RAP Y DROGAS
Hace 1 mes
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