Los clubes de consumidores ya cultivan sus plantas y reparten los resultados de la cosecha entre sus socios, dentro de poco en los growshops podrás entrar y encontrarte plantas creciendo, de las de verdad, nada de plantas de plástico ni cáñamo industrial, marihuana, cannabis.
Tenemos o por lo menos de momento vamos teniendo un par de opciones para poder adquirir cannabis de calidad y no tener que recurrir al mercado negro. Pero nuestra opción favorita la del autocultivo para el autoconsumo nadie nos la asegura y por lo tanto debemos seguir condenad@s a la clandestinidad o por lo menos contar con ello.
El problema se reduce a ser discret@s. Mucho antes de estas nuevas leyes liberalizadoras ya lo hacíamos y antes de que se hablara de cannabis terapéutico, ni de clubes de consumidores, ni growshops ni nada ya cultivabamos nuestras plantas sin esperar permiso de nadie y conscientes de los peligros a los que nos exponíamos por ejercer nuestra afición. Hoy en día l@s cultivador@s caser@s nos seguimos enfrentando a lo mismo. Tenemos algunas salidas juridicas que nos pueden salvar en caso de que suceda lo peor y los abogados que tienen que defender a los agricultores de cannabis hoy en día están más preparados y tienen conocimiento de los vacíos legales que existen. El pertenecer a algunas asociaciones incluye cobertura jurídica lo cual es otra tranquilidad y la apertura social hacia la planta hace que la justicia sea algo más benévola con gente que se ve claramente que cultivaba sólo para su consumo y necesidades e incluso con una producción que no lo da cubierto. Quizás lo más difícil sea establecer donde termina el autoconsumo y donde comienza a ser trafico. Se basan para determinarlo en factores algo dudosos como el tener maquinas de empaquetado al vació o pesas en casa lo cual es bastante subjetivo ya que muchos autocultivadores disponen de esta serie de aparatos para la conservación de su cosecha y el control de la producción de sus plantas. Dentro de lo malo parece que ha mejorado algo la situación pero no demasiado y la verdad no nos podemos relajar demasiado y debemos seguir manteniendo la discreción y escondiéndonos.
Hay algo que me preocupa y que me hace dudar que el cultivo domestico pueda estar despenalizado en breves es toda esa clase de inventos que nos ofrecen para que nuestros cultivos sean más indetectables. Extractores supersilenciosos, filtros de carbono o de ozono para que no nos pueda delatar una pizca de olor que se nos escape fuera del armario, plantas enanas muy dificiles de ver. Ponen a nuestra disposición herramientas para poder seguir jugando al escondite con la justicia y con los vecinos, el casero, etc de manera más efectiva.
En un ambiente de normalización no habria necesidad y no tendría sentido ninguno de estos inventos no siendo para evitar a los ladrones que seguirán existiendo sea legal o no, l@s amig@s de lo ajeno no entienden de despenalización, están a lo suyo. Pues quitando el caso de l@s manos largas en una situación de normalización juridica donde el cultivo a nivel personal domestico para el autoconsumo este permitido por ley no habría necesidad de esconderse. Que más da si el vecino huele tus plantas o las mira desde su balcón o con prismáticos como alguno. Es legal y no podría denunciarte ni hacerte nada y en caso de parecerle mal tu afición a la agricultura cannabica no le quedaría más que ajo y agua.
Pero cuando se preocupan en mejorar los medios de ocultación es casi es señal de que cuentan, ellos que están al tanto de todo, que nos vamos a tener que seguir escondiendo durante tiempo indefinido.
Nunca ha llovido que durara 100 años pero la prohibición parece tener intención de cumplirlos.
Tenemos o por lo menos de momento vamos teniendo un par de opciones para poder adquirir cannabis de calidad y no tener que recurrir al mercado negro. Pero nuestra opción favorita la del autocultivo para el autoconsumo nadie nos la asegura y por lo tanto debemos seguir condenad@s a la clandestinidad o por lo menos contar con ello.
El problema se reduce a ser discret@s. Mucho antes de estas nuevas leyes liberalizadoras ya lo hacíamos y antes de que se hablara de cannabis terapéutico, ni de clubes de consumidores, ni growshops ni nada ya cultivabamos nuestras plantas sin esperar permiso de nadie y conscientes de los peligros a los que nos exponíamos por ejercer nuestra afición. Hoy en día l@s cultivador@s caser@s nos seguimos enfrentando a lo mismo. Tenemos algunas salidas juridicas que nos pueden salvar en caso de que suceda lo peor y los abogados que tienen que defender a los agricultores de cannabis hoy en día están más preparados y tienen conocimiento de los vacíos legales que existen. El pertenecer a algunas asociaciones incluye cobertura jurídica lo cual es otra tranquilidad y la apertura social hacia la planta hace que la justicia sea algo más benévola con gente que se ve claramente que cultivaba sólo para su consumo y necesidades e incluso con una producción que no lo da cubierto. Quizás lo más difícil sea establecer donde termina el autoconsumo y donde comienza a ser trafico. Se basan para determinarlo en factores algo dudosos como el tener maquinas de empaquetado al vació o pesas en casa lo cual es bastante subjetivo ya que muchos autocultivadores disponen de esta serie de aparatos para la conservación de su cosecha y el control de la producción de sus plantas. Dentro de lo malo parece que ha mejorado algo la situación pero no demasiado y la verdad no nos podemos relajar demasiado y debemos seguir manteniendo la discreción y escondiéndonos.
Hay algo que me preocupa y que me hace dudar que el cultivo domestico pueda estar despenalizado en breves es toda esa clase de inventos que nos ofrecen para que nuestros cultivos sean más indetectables. Extractores supersilenciosos, filtros de carbono o de ozono para que no nos pueda delatar una pizca de olor que se nos escape fuera del armario, plantas enanas muy dificiles de ver. Ponen a nuestra disposición herramientas para poder seguir jugando al escondite con la justicia y con los vecinos, el casero, etc de manera más efectiva.
En un ambiente de normalización no habria necesidad y no tendría sentido ninguno de estos inventos no siendo para evitar a los ladrones que seguirán existiendo sea legal o no, l@s amig@s de lo ajeno no entienden de despenalización, están a lo suyo. Pues quitando el caso de l@s manos largas en una situación de normalización juridica donde el cultivo a nivel personal domestico para el autoconsumo este permitido por ley no habría necesidad de esconderse. Que más da si el vecino huele tus plantas o las mira desde su balcón o con prismáticos como alguno. Es legal y no podría denunciarte ni hacerte nada y en caso de parecerle mal tu afición a la agricultura cannabica no le quedaría más que ajo y agua.
Pero cuando se preocupan en mejorar los medios de ocultación es casi es señal de que cuentan, ellos que están al tanto de todo, que nos vamos a tener que seguir escondiendo durante tiempo indefinido.
Nunca ha llovido que durara 100 años pero la prohibición parece tener intención de cumplirlos.
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